Alexandra, dame un número.
Yo, yo, yo, yo, yo.
¿puedo hacer lo mismo?
¡La mujer es sólo el fuego, simplemente no puede creer que ella acaba de dejar a un hombre fuera de sus manos después de la mamada! ¡Creo que va a sudar mucho más satisfacer sus fantasías ahora! ¿Excitar a una dama tan temperamental y juguetona y no satisfacerla? ¡Ella nunca dejaría que eso sucediera!
*¿A quién quiero follar?*
Escribe el número.
¡Buen trabajo, chica! Se folló a su novia en todas sus rajas y la admira. Y el culo de esa chica está en llamas. Todas las lesbianas quieren una polla más grande para poner a sus amigas en el suelo.
Por lo visto, un coche deportivo tiene un poderoso efecto afrodisíaco en las morenas. Da igual que lo conduzca un negro musculoso o el típico hombre blanco, el brutal rugido del motor hace que las bragas de cualquier mujer que sepa de coches se humedezcan. Pero el negro también tuvo suerte en este caso: sus piernas se abren ante él con unas nalgas firmes, ¡uno de los espectáculos más bellos que recuerdo!
Tuya
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